10 momentos tristes de las caricaturas de nuestra infancia

Todos pasamos por infancias felices. Punto. Y lo mejor de ser niño es que tus únicas preocupaciones eran hacer la tarea, sacar la basura, jugar mucho en la calle (nada de exceso de videojuegos como ahora) y ver televisión. Y aún así, todos sufrimos y lloramos como nunca cuando a los que hacían las caricaturas no se les ocurría hacer otra cosa que matar personajes, abandonarlos o acusarlos de rateros. Este listado va para recordar los momentos tristes de la televisión de nuestra infancia, y va sin orden alguno.

Cuando echan al Chavo de la vecindad por ratero

Un ratero empieza a adueñarse de las cosas de mayor valor para la vecindad: un par de planchas, una escopeta y unos calzones de corazoncitos. ¿Y a quién hay que culpar? Al Chavo del 8, al cual le botarón las cosas en su barril y fue acusado por todos en la vecindad de ratero. Fue triste porque el chavo ni culpa tenía, y porque todos se lo gritaron bien feo, pero de aquí aprendimos que mientras tengamos la “concencia” tranquila, no nos debe de importar lo que nos digan. Pero al final el ladrón se arrepiente y devuelve todo, y restituye el honor del Chavo con una torta de jamón.

 

Cuando Heidi se va a la ciudad

La tía de Heidi primero va y la abandona con el abuelito que porque no hay nadie que la cuide. Y después de como 3 años la tía decide que el abuelito no es la mejor influencia y va y le quita a Heidi para que se eduqué en Frankfurt con la pequeña lisiada de Clarita. En algún momento alguien pensó en preguntarle a Heidi si se quería ir allá. Joder, ¡Heidi era feliz cuidando cabras y sufriendo las inclemencias del clima!

 

Cuando Bob Esponja y Patricio se secan

Técnicamente este es de una película y un poco más reciente, pero pobre Patricio y bob Esponja, al final terminaron secos. Pero como sabemos, la amistad y el amor son más fuertes que nada, y con sus últimas lágrimas pudieron vencer y revivir al montón de animales muertos que tenia el señor de la tienda de souvenirs.

 

Cuando Shiryu se queda ciego 

Los Caballeros del Zodíaco están en peligro, así que Shiryu decide autoflagelarse y quedarse ciego. Valor hay que tener para sacrificarse.

 

Cuando Charizard se despide 

Ash se deshace de todos sus pokemons como un Priista de la confianza y la buena voluntad de la gente. Y a pesar de que antes se deshizo de Butterfree, de Pidgeot, de Lapras y casi de Pikachu, la de Charizard es la que más me duele. A Charizard, que tanto batalló para “domesticar”, a Charizard, que le demostraba su cariño lanzándole enormes llamaradas. Aún así Charizard, leal como ninguno, de vez en cuando volvía para salvarle el trasero.

 

Remi el niño de nadie

Remi es una oda a la tristeza. Su padrastro lo vende, sus padres adoptivos lo abandonan, los perros se le mueren. Básicamente le pasa de todo, por eso también se le conoce como Remi, el niño de nadie. Y cuando creía que sería feliz con el Señor Vitalis, éste decide morirse y dejarlo abandonado. A Remi, el niño llorón, se le unen más y más tragedias.

 

Cuando sacrifican a Zordon

Lo triste de este momento no es que se sacrifique Zordon, el mentor de los Power Rangers durante 6 años que va, sino que Rita Repulsa y Lord Zedd, dos de los villanos más emblemáticos de nuestra infancia terminan perdiendo su maldad y se convierten en una feliz pareja de enamorados que deciden bailar en el momento en el que los Power Rangers en el Espacio ganan la batalla final.

 

Cuando ¡ANTHONYYYYYYY! 

Candy es otra de los personajes de anime a la que todo le pasa. Pero ni el que Terry la cambie por la lisiada, ni lo que le pasa en el Hogar de Poni es tan trágico cuando el su Principe de la Colina cae del caballo y muere. Estúpidos guionistas, la muerte de Anthony es un peso que aún cargamos en nuestros corazones. ¡ANTHONYYYYYYY!

 

Cuando las Sailor Scout’s mueren 

En la batalla final contra Sailor Galaxia, lo que menos nos esperábamos fue que ésta las matará tan impunemente. Luego las Sailor Starlight les preguntan que para qué se sacrifican, que ni vale la pena, y ellas, con las últimas lagrimas de su ser, responden con palabras mejor que las mías que el mundo lo vale. Que sí, que ya se habían sacrificado una ves en la batalla con la reina Beryl, pero ésta es más triste porque aquí.

 

Cuando termina Dragon Ball GT 

Dragon Ball GT no habrá sido tan épica como Dragon Ball Z. Y aunque Dragon Ball Z cuenta con momentos más tristes en su haber (la muerte de Krilin, la de Picollo, el sacrificio de Gokú en la pelea contra Cell, Vegeta admitiendo ser mal padre y sacrificarse, la muerte del perro de Majin Bu, etc), los últimos minutos de Dragon Ball GT son memorables porque es un recorrido a los mejores momentos de todo Dragon Ball. Y sí, es muy triste porque es la última ocasión en que vemos a Gokú, con quien nos divertimos tanto.

 

¿Qué les parece nuestro listado? ¿Algún otro momento triste de las caricaturas de su infancia?

Autor: Mauricio Vargas

Todos gustan de definirse como raros. Yo me defino como un tipo normal con gustos particulares. Potterhead desde siempre. Un niño en el cuerpo de un hombre. No soy distraído, me pierdo en el sub-espacio.

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